La Agencia Valenciana de innovación (AVI) ha financiado el proyecto Winds-Store dentro del programa y/o línea de actuación denominado Desarrollo de Proyectos Estratégicos en Cooperación. El consorcio que lo coordina está formado por la empresa Rover Maritime y ha incluido así mismo a Seaplace, Ingeniería Avanzada de Obras Marítimas SLP (IGM), GeoZone, la Fundación Valenciaport y la Universitat Politècnica de València (UPV).
El proyecto comenzó en 2019 y ha finalizado el pasado 31 de marzo. Su objetivo principal es el diseño y desarrollo de una infraestructura de hormigón para aerogeneradores offshore que incluya un sistema de almacenamiento de la energía renovable generada para mantener un aporte constante a la red general en periodos de parada de viento. Su valor diferencial se produce en la utilización de un hormigón especial, de ultra resistencia, y en el acumulador de energía como solución de almacenamiento mediante aire comprimido. La apuesta por el hormigón para construir con él plataformas flotantes sobre las que ubicar los aerogeneradores o para almacenar aire comprimido en depósitos fabricados con él, obvia la falla clásica del acero, la corrosión a la que lo someten los cloruros en ambientes marinos.
Las entidades participantes en el proyecto han desarrollado varias líneas de investigación. Seaplace ha informado que, entre las soluciones, destacan nuevos instrumentos para realizar levantamientos hidrográficos, sistemas novedosos de fabricación, y la tecnología de almacenamiento de energía mediante aire comprimido (CAES) para aprovechar los excedentes de electricidad generados por el parque eólico marino.
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https://www.energias-renovables.com/eolica/valencia-estudia-el-almacenamiento-de-energia-eolica-20210415
